La Misión de Julius Evola por Alexandr Dugin
Solapas principales
1. Evola es una figura paradigmática del tradicionalismo, junto con Guénon. Cuanto más tiempo pasa, más impresionante nos resulta. Ninguno de los guenonianos – Burkhardt, Valsan, Schuon, dejando de lado los menos importantes – podrían siquiera comparase con Evola. Los guenonianos se están volviendo algo común, se han vuelto conformistas, o masones, o han caído en la debilidad mental de la “nueva era”, pero el caso de Evola se mantiene como un monumento del espíritu en estos tiempos oscuros.
2. Tan pronto como los regímenes de la tercera posición se vuelven cosa del pasado, somos menos conscientes del funcionamiento de los partidos y aun de los líderes de esos partidos, y las figuras como Evola brillan más fuerte. Y esto va en aumento. Después de 20 años se dirá que Hitler y Mussolini eran figuras políticas que vivieron en la era de Evola y Heidegger y se dividieron (en un nivel primitivo, y parcialmente) sus ideas.
3. La estrella de Evola se eleva sobre el siglo XXI. El nuevo tradicionalismo se deriva a partir de su lectura atenta y profunda. Nuestra tarea es leer Evola de otra forma, de una manera nueva. ¿Qué significa esto? Vamos a tratar de esbozar la dirección a través de la lectura de estas tesis.
4. Primero: Evola “tradicionalista sin tradición”. Podemos decir que es su culpa. Pero hay que ver en ello su mérito. Tradicionalista sin tradición quiere decir que funciona con una tradición como una matriz semántica y pretende tener acceso directo a la multitud denotativa de la tradición – pasar la tradición a su sistema específico ,denotante-detonante. Estoy convencido de que esta multitud denotativa de la Tradición, que no se puede ver en la mayoría de las tradiciones, y que es visible sólo desde el punto de vista del tradicionalismo, es igual al tema platónico. La simpatía de Evola para con Plotino confirma esto. Lo que él llama vagamente “tradición occidental” – es el neoplatonismo. Y es el tradicionalismo. En este sentido, estoy totalmente de acuerdo con la tesis de Mark Sedgwick sobre las raíces en el Renacimiento de la teoría de Sophia Perennis, aunque el neoplatonismo de ningún modo fue fundado por Ficino y Pico della Mirandola.
5. En segundo lugar, Evola insistió en la centralidad de la experiencia transformadora, que es la práctica iniciática. Esto es importante. Sin una transformación fundamental de la esencia misma del ser humano, no hay nada de qué hablar en la Tradición. Es evidente, incluso desde lo visual: hablar sobre el tradicionalismo – es demostrar algunos datos existenciales muy específicos. El tradicionalismo no es un quehacer de los perdedores, es un tema de aristócratas. De un hombre que tenía una verdadera experiencia del abismo, vienen rayos muy específicos que, con nada se pueden confundir (Eugene Golovin). Si estos rayos no llegan, entonces no hay nada que hablar sobre ellos. La turba debe permanecer fuera del esoterismo. Evola ofreció a la multitud que se aparten o que intenten participar en un riesgo ennoblecedor. La experiencia transformadora es una marca visible y tangible. Evola pidió que sea mostrada en la entrada. Una especie de control para el acceso al tradicionalismo. Evola, releído en una nueva forma, no puede engañar a nadie, ni fallarle a nadie. Para hacer el oro, debe tenerlo. La base de la selección – la prueba – tiramos a la gente en un río con una piedra de molino alrededor de su cuello, si suben son dignos – Agios! Si se ahogan …un maldito menos.
6. Tercero: El tradicionalismo no es válido sin la política. Quién dice lo contrario es un sinvergüenza. Vive en el mundo y quédate contento con la anti-tradición y alucinaciones periféricas de Hiperbórea y la edad de oro, esto no funcionará. Si usted es tradicionalista, cambie el mundo, desafíe la suciedad que nos rodea: la democracia, los derechos humanos, el liberalismo, el materialismo, las ideas y los partidos igualitarios, y bórrelos de la faz de la tierra. Vencer o morir. Una nueva forma: no es sólo quejarse de “los Kshatriyas pobres en el final del Kali Yuga que siempre se equivocan”, sino tome una metralleta, una estación de tren, un punto caliente o una forme una célula revolucionaria.
7. En cuarto lugar, Evola se debe leer desde la izquierda. No desde el punto de vista del igualitarismo, el progresismo y el humanismo, tal interpretación es imposible. Por izquierda, quiero decir contra la burguesía, el capitalismo y el liberalismo. Esto no es complicado. Evola tiene “Orientaciones” y “Hombres entre las ruinas”, que lo dejan claro: la burguesía es mejor que el proletariado, y el capitalismo – que el socialismo. Eso es error de Evola (basado en el error de Guénon). La esencia del error en la identificación del tercer estado con una tercera casta (Vaisya) y la tercera función (Dumézil), y el proletariado con la cuarta casta (Sudras). Equivocado. Los agricultores – son la tercera casta, Vaisyas, junto a los campesinos y pequeños artesanos, que viven en las zonas rurales. La gente del pueblo / burgueses y proletarios / campesinos arruinados que emigraron a la ciudad, no son la tercera o cuarta casta. Ambos son degenerados sociales, como los comerciantes. En la sociedad indoeuropea, no hay comerciantes, ni ciudadanos, ni proletarios. Todos estos simulacros de personas surgieron como parásitos en la periferia de las fortalezas Kshatriyas (les llamamos ciudades) creados para recaudar impuestos. Los capitalistas – medios de contra-iniciación, y el proletariado – campesinos degradados. Se debe estar con los campesinos, incluso degradados, y contra los bastardos mercaderes y banqueros. El tradicionalismo es una revolución contra el mundo moderno y el mundo moderno fue creado por vendedores ambulantes, y no por socialistas y pobres campesinos desarraigados de ayer, atrapados en la ciudad y esclavizado por los vampiros burgueses. El mundo moderno – burguesía. Y la caída de la URSS muestra que Guenon y Evola se equivocaron. El ganador al final de Kali Yuga es siempre sólo lo peor. Nada fué el comunismo, pero son mucho mejores que los liberales. Nueva lectura de Evola: dadaísmo nihilista temprano y anarquismo tardío de derecha (“Ride the Tiger”), esta es la salida por la izquierda del evolianismo.
8. En quinto lugar, Evola y el tema del Sujeto Radical. El hecho de que Evola sea tradicionalista sin tradición puede ser entendido en el contexto de la nueva metafísica. La Nueva Metafísica está del lado de la tradición contra la modernidad y la posmodernidad, pero se le hace una pregunta desagradable: ¿Cómo la Tradición, que es todo, podría sobrevivir al hedor de la existencia actual? Algo que no es tradición pertenece a la Tradición. Y entonces constituye una idea radical del sujeto, que es la fuente de la tradición, y por lo que es indiferente al paradigma en que se mueve. Experimentos radicales con Evola nos acerca al tema. Evola a anunciando la nueva metafísica. Esto es completamente nuevo.
9. Evola en el mundo. Ahmadinejad dijo recientemente, “ni las ojivas nucleares, ni ninguna cantidad de dólares impresos, sólo las ideas son malas.” Cuando llegue el Mahdi, todas estas quimeras se derrumbarán de inmediato. Será peor que la crisis financiera global. Evola – es una idea. Claramente establecida, brillante,tuvo una idea que escupe fuego. Por lo tanto, este es un arma versátil. Todos aquellos que piensan, tienen que tocar a Evola. Nadie podrá soportar las consecuencias.
10 Último: Evola en Rusia. Como casi todo en Rusia, Evola, es un tema triste. Los aristócratas están estudiando a través de aduladores congénitos y la belleza es iluminada por los fanáticos, la literatura es enseñada por aquellos que simplemente pueden leer. Guénon los llamó los imitadores rusos. La explicación científica de esto se puede encontrar en el libro de Alexander Dugin, “Martin Heidegger: la posibilidad de la filosofía rusa.” Nosotros somos los portadores de “logos notos” un logos impropio. Evola, por lo tanto, no rinde honor a nosotros. No es de extrañar que sólo los amantes de la complejidad lo estudien. Este es nuestro destino. Hubiésemos echado a cualquiera que no haya leído a Evola. Y es mejor para los otros idiomas. Es fácil de traducir, pero sus ideas no son tan fáciles de entender en cualquier idioma. Y aún más difícil de vivir. Y si no quiere o no puede entender o vivir, entonces no hay nada que ganar. Le damos los libros de Evola sólo los que pasan ciertas pruebas. Como lo fue en los años 70 y 80 en la URSS. Debemos proteger nuestras margaritas de los cerdos. Antes de proceder a Evola, uno debe ser limpiado del proletariado, y el logos bastardo de la burguesía. Tenemos que crear un círculo hermético, manteniendo a Evola y sus ideas lejos de los perdedores descuidados y desaliñados.