Desde un punto de vista geográfico, la guerra en Ucrania se libra en Europa. Pero, por otro lado, esta guerra es un fracaso estratégico de la OTAN, especialmente porque nunca tuvo en cuenta las preocupaciones y las exigencias de seguridad de Rusia (no ampliar la OTAN hacia el Este,
La guerra siempre ha sido una forma de confrontar la realidad. Todo lo que precede a la guerra es de carácter virtual y, en la mayoría de los casos, se trata de desinformación producida por ambos bandos. Sin duda la desinformación dificulta nuestra capacidad para entender y comprender que es lo que realmente sucede, por lo que podemos decir que la relación entre la información y la realidad está basada en la desinformación.
Los objetivos militares del presidente Vladimir Putin en Ucrania son dos: desmilitarización y desnazificación del país. Estos objetivos son bastante comprensibles, pero si se quiere llevar a cabo la desmilitarización de Ucrania por la fuerza (ya que todos los otros medios, a excepción de la coerción directa, se han agotado y ya no tienen efecto) será necesario controlar de forma militar y estratégica todo el territorio ucraniano. Además, la desnazificación requerirá de un control político y administrativo del Estado. Se trata de una orden y no de una petición o un deseo bien intencionado. Si realmente se quiere aplicar este programa, se necesitará de una gran coordinación con tal de preparar una élite que lleve a cabo semejante programa.
Es un honor para EL MANIFIESTO coincidir con las ideas emitidas por el filósofo ruso Aleksandr Dugin, quien, en este texto que ayer publicó en Facebook (de momento, aún no le han cerrado la cuenta), viene a decir lo mismo que decíamos en el editorial que, firmado por nuestro director y titulado «La guerra de “Hitler” contra “Hitler”», publicamos hace un par de días. A saber, lo que se juega en la guerra ruso–ucraniana es, en el fondo, un conflicto entre dos concepciones diametralmente opuestas del mundo.
Desde el 2014, hace aproximadamente siete años, he presenciado de forma muy dolorosa todo lo que ha acontecido en la RPD y la RPL, y ni hablar del resto de Ucrania.
Creo que los actuales acontecimientos se hubieran desarrollado de una forma muy diferente si el objetivo de Rusia fuera únicamente reconocer la independencia e integridad territorial de la RPD y la RPL.
En una entrevista para el canal Tsargrad, Alexander Dugin reflexiona sobre el desarrollo del conflicto en Ucrania y sus elementos civilizatorios, existenciales y como signo de multipolaridad.
Como dice el filósofo y analista político ruso Aleksandr Dugin, el mundo unipolar, la ideología globalista y la hegemonía occidental se están derrumbando, y Estados Unidos no quiere quedarse de brazos cruzados.
En medio de la tormentosa propaganda que Occidente ha desencadenado sobre la cuestión ucraniana – que va desde un llamado a la repatriación de los ciudadanos estadounidenses y europeos en Ucrania hasta la filtración por parte de los medios de comunicación de que el gobierno de Kiev ha comenzado a trasladar la infraestructura gubernamental y las instituciones más importantes a la frontera occidental del país – resulta difícil pensar o hablar de otra cosa.
Antes de comenzar a hablar de la contrahegemonía, en primer lugar, debemos dirigirnos a Antonio Gramsci, quien introdujo el concepto de hegemonía en el amplio discurso científico de la ciencia política. En sus enseñanzas, Gramsci dice que en el marco de la tradición marxista-leninista, hay tres zonas de dominación:
La crisis que hoy están experimentando las relaciones entre Rusia y Occidente no tiene nada que ver con el gas, el petróleo, los recursos energéticos o la economía. Los intentos de explicar la política como una especie de competencia por un determinado “Premio”, tal y como lo hace Daniel Yergin, son bastante superficiales y vanas. Lo que está ocurriendo hace parte de luchas entre civilizaciones y conflictos geopolíticas donde las cuestiones económicas son secundarias e instrumentales.
Las ideologías políticas actuales surgieron al amparo de la Modernidad y acabaron cristalizándose durante los siglos XIX y XX al calor de las guerras. La primera ideología política que surgió fue el liberalismo, que no era otra cosa que un reflejo de los valores y las leyes creadas por la sociedad burguesa.
El actual enfrentamiento entre Rusia y Occidente – especialmente con los Estados Unidos – ha llegado a tal punto que, independientemente de que se produzca o no un conflicto militar abierto, se hacen cada vez más claras las diferencias no solo geográficas, sino también civilizacionales e ideológicas, que existen entre ambas partes. Esta ruptura total e irreversible entre Rusia y Occidente permanecerá independientemente de que uno u otro actor imponga sanciones o despliegue tropas cerca de las fronteras de su enemigo. Por lo tanto, no importa que Rusia o Estados Unidos hagan el primer disparo o que rumbo tomaran los acontecimientos futuros, lo cierto es que esta ruptura ya está ocurriendo y ambas partes – especialmente la rusa – no saben cómo explicar lo que está sucediendo
Las exrepúblicas soviéticas pueden elegir entre conservar su soberanía o renunciar a su integridad territorial. Pienso que debemos modificar el concepto de soberanía, ya que vivimos en un mundo donde solo pueden ser soberanos los Estados que posean enormes arsenales nucleares, grandes recursos demográficos o naturales y vastos territorios.
Los disturbios que han acontecido en Kazajistán han vuelto a despertar el interés en la reunificación del espacio postsoviético, que es hasta el día de hoy un problema que no se ha resuelto.
Alexander Dugin ha cumplido 60 años este 7 de enero del 2022, que es el día en que los ortodoxos celebran la Navidad. La conmemoración de este aniversario es sin duda increíble, especialmente si tomamos en cuenta la enorme cantidad de libros, artículos, conferencias y discursos que Dugin ha impartido durante los últimos treinta años.
Empecé a interesarme por la obra de Alexander Guélievichhace exactamente 30 años, en el momento en que comenzó a publicar los primeros capítulos de su libro “La gran guerra de los continentes” en el periódico “Den” (Día).
Una de las películas más famosas de la industria cinematográfica soviética fue El destino del soldado estadounidense. En esta película se planteaban reflexiones muy interesantes las cuales giraban alrededor de la vida de un personaje heroico y valiente que vivía dentro de un ambiente intrínsecamente mediocre, pacifista y hostil a todo lo que este representaba.
Nick Land es un filósofo británico nacido en 1962 y es conocido por haber inventado la corriente filosófica de la Ilustración Oscura a finales de la década de 1990, justo en el momento en que se producía la crisis de las ideologías, además de ser el creador del concepto de aceleracionismo.
Hace poco tuve la oportunidad de discutir públicamente con Francis Fukuyama en un programa de televisión y ambos llegamos a la conclusión de que la definición de la democracia como el poder de la mayoría se ha vuelto obsoleta, disfuncional y caduca.
El principal problema que tiene la vacunación es el siguiente: la experiencia nos ha demostrado (y me fundamento en dos familiares bastante ancianos que perdí hace poco) que la vacunación no impide que contraigamos el coronavirus y tampoco impide que seamos portadores y transmisores del mismo.
Traduccion de Juan Gabriel Caro Rivera
Este 2020 se han cumplido cien años desde que Nikolai Trubetskoi publicó en la capital de Bulgaria, Sofía, el libro Europa y la Humanidad. Es a partir de ahí que podemos hablar de la filosofía rusa conocida como eurasianismo.
Traducción de Juan Gabriel Caro Rivera
Este evento giro alrededor del problema del legado de los primeros representantes del movimiento eurasiático, la importancia de sus ideas filosóficas y políticas para la actualidad, el análisis de las ideas de Savitsky, Trubetskoy y otros pensadores importantes de este movimiento, así como la existencia de movimientos análogos al eurasianismo en otras partes del mundo y el problema del legado de Turán.
Traducción de Juan Gabriel Caro Rivera
Dugin subraya que “es posible que en los últimos 100 años ningún otro paradigma haya demostrado estar en lo correcto y tener una visión tan acertada de nuestro futuro como el eurasianismo, por lo que este centenario de existencia ha sido bastante fructífero”.
Raymond Abellio observó que “Europa se fija en el espacio, es decir, en la geografía”, mientras que Occidente es “móvil”. De hecho, “Occidente” no ha dejado de viajar y de cambiar de dirección. Inicialmente, el término se refería solo a la tierra del sol poniente (Abendland), en contraposición a la tierra del sol naciente (Morgenland).
O filósofo russo Aleksandr Dugin dá a sua opinião atual sobre a questão das vacinas, da pandemia, da variante omicron, etc., ressaltando que o mundo nunca voltará a ser o que era antes da pandemia e que a humanidade precisa aproveitar a situação para corrigir seus erros e mudar de horizonte.
Com relação à vacinação COVID-19, vejo que o principal problema está no seguinte.
Traducción de Juan Gabriel Caro Rivera
Assange intentó seguir las reglas que existían dentro del mundo occidental, pero su extradición a los Estados Unidos significa que estas ya han dejado de tener importancia. Por supuesto, esto ha quedado claro para todos los que no viven en Occidente. ¿O no es así? Ha llegado la hora de tomar partido por Assange o por sus verdugos, ya que este acontecimiento nos afectará a todos nosotros, seamos rusos, musulmanes, europeos o asiáticos.
Traducción de Juan Gabriel Caro Rivera
Este 10 de diciembre el presidente estadounidense Joe Biden celebró la famosa “Cumbre Democrática” a la que asistieron más de 110 países de los 197 que existen. Es por esa razón que resulta inútil subestimar la dimensión política de semejante acontecimiento.
No obstante, es obvio que el gobierno de Biden ha decidido seguir la línea de los neoconservadores y preservar a cualquier precio la unipolaridad: esta cumbre es un intento de revestir la hegemonía estadounidense con un halo de legitimidad.
La publicación en Chile del libro Teoría del mundo multipolar es para mí, como autor, un acontecimiento trascendental. En este libro describo en detalle el orden mundial que comenzó a tomar forma a medida que el mundo unipolar comenzaba a declinar.
La idea rusa es hermosa, buena y verdadera. Tiene las propiedades de la estética metafísica, ya que no es utilitaria. El pueblo ruso no es pragmático ni individualista. Los rusos no están motivados por la supervivencia. La idea rusa es vital, ni forzada ni abstracta. Es parte de lo que hace que nuestra sangre fluya por nuestras venas. El alma hace que una persona rusa sea rusa. Ni una línea en un pasaporte, ni rasgos externos. Cuando hablamos de la idea rusa, hablamos del alma rusa. Si preguntamos respetuosamente, ¿qué llevas dentro, idea rusa? Tal vez entonces inicie una conversación con nosotros, una conversación histórica, cultural, interna. Nos hablará de los antiguos eslavos, de sus costumbres, rituales, conexiones con otros pueblos, luego de lo que ganó cuando se formó el estado ruso liderado por los varegos, y después la conversación continuará sobre el periodo de Kiev. Entonces, algo ocurrió con la idea rusa, hubo una ruptura del estado de Kiev en principados. Y la idea rusa a través de "El cuento de la campaña de Igor", a través de su autor hablará de la necesidad de unir frente a los polovtsianos a todos los príncipes rusos. No lo escucharon, no se unieron, y como resultado Rusia estuvo bajo los mongoles. Pero si la idea rusa se salvó o se perdió gracias a ella es una cuestión muy complicada. Alguien no estuvo bajo los mongoles y desapareció, pero alguien, por el contrario, sí lo estuvo, y posteriormente alcanzó un tremendo éxito. Salimos de la Horda en el siglo XV y en el XVI proclamamos el Reino de Moscú. Nuestra idea rusa se vistió de púrpura imperial y adoptó la forma de Moscú como la Tercera Roma. Más tarde se adentra en las terribles pruebas de la Época de los Problemas y las supera gracias a la elección de los Romanov. Entonces, el cisma eclesiástico divide la idea rusa en dos. Es una tragedia. A partir de ese momento, los rusos se volvieron en cierto modo esquizofrénicos. Dos voces que discuten constantemente entre sí: tenemos la mitad de Moscú y la de San Petersburgo, la ortodoxia y los viejos creyentes, el eslavofilismo y el occidentalismo... Comienza la historia de la enfermedad de la idea rusa. Los eslavófilos proponen curarlo, restaurar la unidad perdida en la época petrina, mientras que los occidentales dicen que no hace falta ninguna idea rusa. Entramos en el siglo XX en mayor medida con los eslavófilos - es la Edad de Plata, empezamos a buscar a tientas esta realización eslavófila en la filosofía religiosa rusa.
No existe una tercera opción. El conservadurismo se convierte en sinónimo del industrialismo, el progreso y el consumo frente a las amenazas medioambientales. Sin embargo, esta idea es incompatible con el tradicionalismo. La “Nueva Derecha” europea, por el contrario, tiene ideas muy diferentes. Alain de Benoist ha escrito un breve libro que tiene por título Objetivo: decrecimiento, donde aborda los problemas ecológicos que enfrentamos.
¿En qué lugar habita la “voluntad” rusa? O. Spengler dijo que los rusos eran un pueblo “estepario” y esta idea se convirtió no solo en un lugar común en Occidente, sino también en Rusia. Según Spengler, la estepa, la “llanura sin límites” o un vasto espacio horizontal, es la forma “pre-simbólica” de la cultura rusa, ya que esta se expande de forma infinita. Spengler sostiene que el alma rusa “no tiene voluntad” porque los rusos entienden por esta palabra todo lo opuesto a los alemanes. La voluntad es para los alemanes una forma de concentración o un esfuerzo dirigido hacia un resultado.
Las críticas que ha dirigido Putin en contra el capitalismo, además de toda una serie de declaraciones que ha hecho el jefe de Estado ruso recientemente, tienen un claro contenido ideológico.
El día 27 de octubre de 1672 es considerada la fecha en apareció el teatro ruso, pues fue en este momento cuando por primera vez en nuestra historia fue representada una obra teatral en la Mansión de la Comedia, situada en la calle de Preobrazhenskoye, Moscú. Este edificio fue construido por orden del zar Alexei Mijáilovich para servir exclusivamente a este fin. Los actores eran alemanes que fueron contratados en el Barrio Alemán y la obra fue actuada en este idioma. El drama estaba basado en una interpretación luterana de cierta historia bíblica y llevaba por título “Comedia acerca de cómo Artajerjes ordenó ahorcar a Amán apetición de la reina y bajo las instrucciones de Mardoqueo”.
En nuestra sociedad actual existe un grupo oprimido al cual se le ha privado de sus derechos y es continuamente humillado. No estoy hablando de inmigrantes ilegales, minorías sexuales, gitanos o feministas que seguramente pueden tener vidas difíciles. No obstante, al grupo al que me refiero le es casi imposible respirar y hablar hoy en día.
Podemos decir que los países que tienen una idea propia son casi siempre los países que crean imperios o que son capaces de unir grandes espacios y al mismo tiempo dan nacimiento a formas de pensamiento estridentes, brillantes y profundas. No todos los países o pueblos tienen una idea. Por ejemplo, los judíos no tuvieron un Estado por casi dos mil años, pero siempre ha existido una idea judía. Toda civilización tiene su propia idea. La idea rusa es antes que nada la idea de toda una civilización. Existen muchas menos civilizaciones que países. A veces sucede que las grandes civilizaciones poseen ideas pequeñas, mientras que las pequeñas naciones poseen ideas grandes.
Los precios del gas se han disparado en Europa y están batiendo todos los récords. Y eso sucede a pesar de los continuos ataques en contra del Nord Stream 2 y la publicidad que busca imponer la agenda verde. El costo de mil metros cúbicos de gas natural ronda a hora los 1.500 dólares, lo que significa que su precio se ha quintuplicado en los últimos dos años. Sin embargo, los expertos aseguran que los precios seguirán subiendo y que alcanzarán los 2.000 dólares en invierno. Por otro lado, Europa se está viendo obligada a importar carbón desde Rusia.
Youtube ha vuelto a atacar y esta vez a eliminado la cuenta del canal de televisión Russia Today en alemán sin siquiera previo aviso. Esto aconteció poco después de que la televisora alemana me hiciera una entrevista donde hablaba sobre las recientes elecciones en el Bundestag. ¿Coincidencia? Sí, creo que es una coincidencia, pero resulta bastante simbólica. Youtube eliminó hace casi un año mi canal de filosofía que estaba montado en su plataforma y que versaba principalmente sobre Aristóteles, sin hablar de que también eliminaron el popular canal de televisión Tsargrad. Youtube perdió la demanda que le interpuso Tsargrad, pero al parecer no va a cambiar su política. Ahora bien, le ha llegado el turno a Russia Today Deutschland.
La actual situación mundial es extremadamente favorable para Rusia. Sería un crimen no aprovecharla. El mundo unipolar se está derrumbando frente a nuestros ojos y la hegemonía estadounidense se debilita rápidamente. Estados Unidos ya no puede ser considerado como el único líder del mundo y eso ha quedado muy claro para todos. Trump había comenzado a aceptar la multipolaridad y en este sentido compartía muchas de las ideas de la derecha estadounidense tradicional (y no los presupuestos de los neoconservadores de orígenes trotskistas). No obstante, la llegada de Biden al poder y la promoción del “Great Reset” parecían ser un intento de los globalistas de relanzar la hegemonía occidental.
El lunes 4 de octubre se produjo un verdadero apagón mundial. Uno se siente tentado a decir que fue una anticipación del fin del mundo, pero semejante comparación solo es válida si viviéramos en un mundo iluminado por la luz. En cambio, nosotros existimos inmersos en la oscuridad, por lo que sería mejor decir que se trató, más bien, del fin de las tinieblas.
RT DE entrevisto al filósofo, politólogo y sociólogo ruso Alexander Dugin con tal de conocer su opinión sobre las elecciones alemanas que transcurrieron este domingo pasado. En esta entrevista exclusiva con el canal de televisión, el filósofo de 59 años habló sobre los resultados de las elecciones y las consecuencias que están tendrán para las relaciones germano-rusas. Dugin sostiene que estas elecciones del Bundestag fueron bastante inusuales, especialmente debido a la “terrible” derrota que sufrieron el CDU y el CSU. Los resultados han sido un duro golpe contra la centro-derecha y los liberales de derecha que siempre han intentado mantener buenas relaciones con Rusia. Además, Dugin recuerda que las relaciones bilaterales entre Rusia y Alemania fueron mucho mejores durante la cancillería de Gerhard Schröder, quien pertenecía al SPD.
Vamos a hablar del problema filosófico más importante: el problema de la Nada. Quizás podemos pensar que este es el problema más sencillo de todos, pero, en realidad, nada es más complejo que pensar la nada. Cuando reflexionamos sobre el ser, incluido nuestro ser o nuestra vida, de repente nos encontramos, tarde o temprano, con el problema del límite. El ser está ahí, no obstante, si queremos apreciarlo verdaderamente, tenemos que relacionarlo con algo y ese algo es la Nada.
Es a partir de estos presupuestos que somos capaces de comprender el significado de la fenomenología o la concepción de los existenciales de Heidegger. Heidegger sostiene que el mundo no existe fuera de nosotros: In-der-Welt-Sein es un existencial y eso significa que no existe el mundo sin el Ser-en-el-Mundo y no existe el mundo sin nosotros. Fuera de nosotros = NADA. Estos son los principios de la Tradición y lo sagrado. Cuando salimos al mundo exterior y entramos en el espacio de lo que está afuera de nosotros nos topamos con la NADA. Eso quiere decir que la externalidad no existe. Pretender que existe el mundo, el cosmos, la materia, la física, las cosas y los cuerpos fuera de la interioridad significa cometer un grave error ontológico. Aceptar la existencia de la externalidad o que las cosas existen totalmente independientes de nosotros es entrar en el espacio de la falsedad absoluta y caminar hacia la pseudología.
La élite rusa actual es profundamente patológica, especialmente porque se formó a partir de la década de 1990 y es producto de la desintegración de la sociedad soviética. La mayoría de sus integrantes tiene su origen en oficiales soviéticos corruptos, delincuentes o “comunistas” y “miembros del Komsomol” que se convirtieron en liberales y agentes prooccidentales. Rusia cambio mucho desde que Putin llegó al poder, pero la élite rusa sigue siendo la misma. Además, Putin tampoco intentó cambiarla y se limitó a aceptarla tal y como ella es.
La idea de que existen partículas materiales individuales e indivisibles (átomo significa en griego algo indivisible), es decir, la existencia de partes que no necesitan del todo, tal y como sostenían Leucipo y Demócrito, y posteriormente Epicuro y Lucrecio Caro, se ha convertido en un callejón sin salida. La ciencia de la Antigüedad y la Edad Media consideraban que esta idea era falsa, y no porque los átomos no puedan existir (lo que hoy se llama “átomos” son partículas divisibles que ya no se corresponden con el concepto), sino porque el Uno – la mente, el alma, el espíritu – no puede proceder de ellos, como lo demostró Platón. Tenemos que elegir entre la mente o el átomo. El atomismo implica abrazar el materialismo radical y aceptar que el mundo no tiene sentido. Se trata, por tanto, de un mundo dominado por la locura, donde todo es arbitrario en él y las cosas suceden de una determinada forma sin una causa real (como muy bien plantea la ley de la isonomía). Cuando Galileo, Newton y Gassendi convirtieron el atomismo en el fundamento de las ciencias naturales, la humanidad cayó víctima de un delirio absoluto y devastador, por lo que comenzamos a alucinar que el mundo exterior no solo no existía, sino que simplemente no podía existir. La visión científica del mundo terminó derivando en una especie de demencia colectiva y esto nos llevó al delirio. La corrupción de nuestro pensamiento provocó la corrupción del mundo que nos rodea y finalmente todo esto nos llevó al materialismo, el ateísmo, la democracia y el liberalismo. Además, el atomismo se expresa a nivel político en el individualismo, pero el individuo no existe ni puede existir como átomo. El hombre es parte de un todo y su aislamiento conduce a la autodestrucción. La ausencia del Uno – tanto en la religión como en el Estado, la sociedad y la moral – lleva a la degeneración de la humanidad, algo de lo que somos testigos actualmente